El próximo martes (We can dance if you want to)

Lo malo de crecer en los ochenta en la pachuqueña calle de Guerrero, era que no había vecinos para jugar por las tardes. La solución a este aburrimiento incluía caminar por las tardes y visitar las multiples tiendas de discos que iban apareciendo conforme el formato gozaba su época de gloria. Una tarde salí a preguntar por el disco de una canción que descubrí en “Video Rock”, uno de los primeros programas dedicados a poner videos musicales en México.

De todas las tiendas que recorrí fue solamente en “Octopus”, que se encontraba al fondo de Plaza La Fuente, donde me aseguraron que el disco de Men Without Hats, llegaría la siguiente semana. El martes para ser precisos, porque, supe entonces, que los lunes iban a la Ciudad de México por nuevos discos para surtir al pequeño local.

Pasaron varias semanas y muchas visitas. La respuesta siempre era que el martes siguiente llegaría. Supongo que la encargada pensó que mi insistencia no era más que el fruto de la imaginación de un preadolescente con ganas de entretenerse por las tardes recorriendo tiendas de discos preguntando por un disco que no existía. Aunque esa no era mala idea, la realidad es que el video de “Safety Dance” seguía apareciendo en la tele.

Una tarde, una amiga de mi mamá nos platicó que viajaría a España y que si se nos ofrecía “algo”. Supongo que lo…